Para lograr
ciudades sostenibles y amigables con el medioambiente, los responsables políticos y diseñadores urbanos deben participar en una
planificación urbana ecológica basada en los principios de la
economía circular. Por ejemplo, en 2009, Copenhague fue declarada
la ciudad más sostenible del mundo. Es una ciudad muy amigable con las bicicletas, con casi un 47% de sus habitantes usando bicicletas cada día. Tiene el
número más alto de vehículos eléctricos per cápita a nivel global, y su uso de la
energía eólica está entre los más altos del mundo. Enel X puede ayudar a las ciudades a convertirse en circulares y verdes gracias a su compromiso con
la innovación y la sostenibilidad y a su
amplia gama de soluciones inteligentes, que incluyen la movilidad eléctrica, el almacenamiento de energía, energías renovables, redes inteligentes, alumbrado público y gestión de edificios.