Arthur C. Clarke, autor del clásico de ciencia ficción «2001: una odisea del espacio», dijo una vez: «Cualquier tecnología suficientemente avanzada es indistinguible de la magia». Con «cerebros» dotados de inteligencia artificial que les permiten «hablar»entre sí –y con centros de control remotos–, los sistemas inteligentes de alumbrado público podrían encajar a la perfección. Y si integran soluciones de alumbrado público led, el efecto «mágico» es aún mayor.
Pero, ¿qué son exactamente las farolas inteligentes, también llamadas alumbrado público inteligente? Para empezar, las farolas inteligentes son conscientes de su entorno y ajustan la luz en función de los datos que recogen de los sensores. Al ser capaces de «entender» los datos en tiempo real, las farolas inteligentes pueden, por ejemplo, encenderse y apagarse solas en función de las condiciones de luz ambiental. Como por «arte de magia».
El uso de sistemas inteligentes de alumbrado público tiene muchas ventajas, entre ellas: