De todas las técnicas artísticas, el mosaico es quizás aquella en la que la combinación con la luz resulta más importante: los maestros de la Edad Media no colocaban las teselas siguiendo una superficie plana, sino desfasadas entre sí, precisamente para ensalzar los reflejos de la luz.
Los maravillosos mosaicos de la Basílica de Santa María la Mayor de Roma, de entre los más hermosos y famosos de la Ciudad Eterna, merecían brillar con una luz adecuada, y dicha luz es la de la nueva instalación realizada por Enel Sole, sociedad de Enel X especializada en iluminación artística y pública, con el apoyo de la Fundación Endesa.